El organismo encargado de regular la competencia comercial en Estados Unidos anunció la resolución de un conflicto con dos empresas que ofrecían servicios para redes sociales.
El resultado fue una multa de 2.5 millones de dólares para la empresa Devumi y una fuerte advertencia para Sunday Riley a no repetir las acciones.
Devumi ya cerró sus operaciones pero vendía resultados en estrategias de social media a través de usuarios y engagement falsos.
Por su parte Sunday Riley realizaba comentarios falsos en la web de Sephora.